En febrero de este año, el grupo que controla Aero Contractors despidió a toda la dirección de la línea aérea y abrió una investigación interna sobre presunto fraude y malversación.

El tope de la crisis que afecta directamente a la aviación del país ocurrió en mayo de este año, cuando por falta de combustible, decenas de vuelos fueron cancelados y miles de pasajeros quedaron varados en el país. Para eludir este problema, las compañías aéreas han intentado alimentar sus aviones en Accra, capital de Ghana. Esta semana, Emirates anunció que sus vuelos entre Dubai y Abuja harán una parada técnica en Ghana para repostar la aeronave.
El mismo día, la First Nation Airways anunció la suspensión indefinida de sus operaciones, también afirmando que las condiciones actuales del país no favorecen su continuidad.
En un comunicado, la Autoridad de Aviación de Nigeria dijo que las aerolíneas suspendieron sus operaciones debido a problemas financieros internos y no debido a los problemas económicos del país.