El lunes, uno de los capitanes de la aerolínea escocesa Loganair le dio el ramillete de flores a la pasajera Anne Rendall para conmemorar el logro.
Y es que con sus aviones Britten Norman Islander de ocho asientos, a la aerolínea le toma dos minutos hacer el recorrido de 2,73 kilómetros entre Westray y Papa Westray en Orkney, un archipiélago en la costa noreste de Escocia.
Pero en las condiciones meteorológicas ideales, el viaje puede llegar a durar sólo 47 segundos.
Ese trayecto está registrado en el Libro Guinness de los Récords como el más corto del mundo.
Los vuelos en esa zona cubren el servicio aéreo de las islas ubicadas en Orkney: Eday, Stronsay, Sanday, North Ronaldsay, Westray y Papa Westray.
“Esencial”
Desde 1967, Loganair ha operado la ruta.
“La ruta es una joya de nuestra red y es conocida en el resto del mundo”, dijo el director de la aerolínea, Jonathan Hinkles.

“Es usada por maestros, doctores, policías y estudiantes y les ayuda con sus rutinas diarias”, afirmó Hinkles.
Rendall es una empleada de un banco que ha usado el servicio desde hace 25 años, ha hecho 10.000 vuelos y ha viajado con cada uno de los pilotos que hace el trayecto.
“Todos los pilotos han sido excelentes”, dijo la pasajera.