Las pruebas de vibración en tierra se realizan para medir el comportamiento dinámico del avión, confirmando los modelos teóricos de varias condiciones de vuelo, tales como maniobras, vuelo en turbulencia y durante los aterrizajes. Además de ser necesario para decidir si un avión realizará su primer vuelo, los datos de éstas pruebas son requeridos por las autoridades aeronáuticas para emitir el certificado tipo.
Las pruebas del A350-1000 fueron realizadas en un periodo de dos días, comparado con los nueve que tomaron las pruebas del A350-900 y más de un mes que tomaron los modelos previos de Airbus.
Basados en el nuevo método implementado en el A350-1000, se usará también en el A330neo, que se tiene programado comience la campaña de pruebas durante el primer semestre de 2017.