Por Gustavo Galeano
Peter Cerda, Vicepresidente de IATA para América Latina, dijo: “El cobro de tarifas por el transporte de equipajes ayudaría a posicionar a Brasil dentro los estándares internacionales. Este es uno de los únicos países del mundo en que la decisión de cobrar por los equipajes no está en manos de las compañías aéreas”, finalizó durante una conferencia en Sao Paulo.
La Justicia del vecino país suspendió el pasado 13 de marzo de manera cautelar la normativa aprobada por la Agencia Nacional de Aviación Civil (Anac) que ponía fin a la obligatoriedad que tenían las aerolíneas de despachar sin costo hasta 23 kilos de equipaje por pasajero en vuelos nacionales y hasta 32 kilos en los internacionales, que tendría que haber entrado en vigor un día después.
Para el representante en Latinoamérica de la IATA, “colocar las tarifas de equipaje a cargo de las compañías aéreas es ofrecer a los pasajeros opciones de cómo él puede viajar”. Continuó su declaración diciendo que “Brasil tiene mucho potencial para ser uno de los líderes mundiales en la aviación, pero no lo es por la alta burocratización y los impuestos aplicados en el país.”
El pedido de anulación fue realizado por el Ministerio Público de Sao Paulo, que argumentó que la nueva regla no se ajusta al Código de Defensa del Consumidor, hiriendo la Constitución al revocar derechos ya adquiridos.
Si bien la pausa en la expedición de la ley tiene un carácter preventivo y con la finalidad de un estudio más minucioso, las excesivas demoras típicas de los países latinoamericanos en las tomas de decisiones podrían postergar la sentencia final, beneficiando en un corto plazo al pasajero, pero en el mediano y largo plazo podría resultarle hasta contraproducente, ya que la tendencia global en la aviación comercial es la de implementar modelos de negocios híbridos o de bajo costo en rutas de corto y medio radio, en las que el pasajero paga solo por lo que necesita, abaratando los tickets “desde”, y obligando a las aerolíneas a tener que continuar incluyendo en sus boletos este costo tácito.
Líneas aéreas como por ejemplo, Latam Airlines, ya comenzaron a cobrar por equipaje despachado en bodega en vuelos dentro Colombia, el modelo continuaría luego en los demás países en los que operan vuelos de cabotaje. Brasil no sería la excepción dentro de los planes del Grupo Latam, pero este tropiezo probablemente genere mayor análisis y más prudencia en las decisiones.
En el caso de GOL, la mayor aerolínea de Brasil, no ha insinuado el cobro por equipaje dentro de sus planes inmediatos, pero no sería de extrañar que lo estuviera, considerando que la compañía nació bajo una filosofía low cost.