Por Gustavo Galeano
El elegante quadcopter pone el énfasis en la simplicidad y tiene un precio inicial de menos de 200.000 dólares estadounidenses. Los ingenieros buscaron ofrecer una experiencia de vuelo divertida y segura para el piloto y un pasajero.
Aunque parezca un helicóptero convencional, la aeronave cuenta con cuatro hélices contra-rotativas fijas, dos en cada brazo. El SureFly es propulsado por un motor de combustión a gas que genera energía y está respaldado por dos baterías paralelas de iones de litio, que pueden alimentar los motores eléctricos en caso de fallo del motor principal, reduciendo la necesidad de repostar.
Está equipado además con un paracaídas balístico, que en el peor de los casos, dispararía directamente hacia arriba, sin ser afectado por las ocho aspas del SureFly, para proporcionar un aterrizaje seguro.
En los controles es donde el SureFly muestra su forma más simple. Un joystick se utiliza para impulsar el avión hacia adelante y hacia los lados, mientras que los botones de altitud y el ordenador de a bordo ajustan el acelerador de forma automática.
“El sistema de vuelo fue diseñado para asistir al piloto, pero no para reemplazarlo”, explicó el presidente de la compañía con sede en Ohio, Steve Burns, a principios de este mes, por lo que el SureFly aún requiere una licencia. “Dado que está clasificado como una aeronave deportiva ligera, sólo necesita 20 horas de entrenamiento para el piloto, cuando la formación para un helicóptero tradicional es de 1.500 horas”, dijo Burns.
La performance del SureFly está pensada para funcionar como un taxi aéreo, alcanzando una velocidad crucero de 113 km/h a 4.000 pies de altura, y una distancia máxima de 70 millas transportando hasta 400 libras, proporcionando ventajas no sólo en ciudades, sino también en agricultura y en misiones de emergencia.
*Fotos: Flyng