Por Gustavo Galeano
La línea aérea con base en el aeropuerto Hartsfield Jackson de Atlanta compró hace tiempo casi toda la flota útil de aviones McDonnell Douglas MD90, y hace no mucho había indicado que pensaba seguir haciéndolos volar al menos una década más.
Sin embargo, esto ha cambiado días pasados, pues se supo que estos aviones con cola en T y motores traseros comenzarán a ser retirados gradualmente, ya que, si bien son económicos y se ajustan a rutas cortas del este de los Estados Unidos, Delta se encontró con un problema, y es que usan una versión especial de turbinas V2500 de la International Aero Engines (IEA). Al ser Delta el único operador a nivel mundial, las recorridas e inspecciones de los mismos se han vuelto prohibitivos en costos, al punto de volver antieconómica la continuidad en servicio de estas aeronaves de 160 asientos y alcance de hasta 3.206 kilómetros.
El equipo matriculado como N9232 será el primero en abandonar la flota de más de 60 aeronaves McDonnell Douglas MD90 de Delta en diciembre de este año.
Delta no informó el tipo de aeronave que reemplazará a las que saldrán de flota, pero por capacidad y recientes pedidos hechos se podría deducir que la familia A320 de Airbus sería la escogida.