Por Gustavo Galeano
La compañía llegó a volar desde Montevideo a toda la región y a Europa, tuvo diferentes etapas, luces y sombras, varias administraciones (estatal y privada) y accionistas, una flota variada (De Havilland DH90, Vickers Viscount, Douglas DC3, Boeing 707/727/737/757/767, DC10, entre otros) y un sinfín de problemas económicos hasta su fin en 2012.

Durante sus últimos años de existencia había creado un hub regional en el aeropuerto de Carrasco, desde el cual volaba a las capitales sudamericanas y ciudades secundarias utilizando aviones Bombardier CRJ900 de 90 asientos pintados con atractivos colores.
En sus últimos años de existencia, la ruta entre Montevideo y Asunción era operada con 14 frecuencias semanales.