Por Gustavo Galeano
Como ya lo había adelantado Pieter Elbers, presidente de KLM, la nueva compañía no será una low cost, porque se mantendrán los estándares de calidad de Air France, pero peleará por un segmento de pasajeros “jóvenes, activos y conectados”, con fuerte enfoque en las plataformas digitales.
El nombre Joon deriva de la palabra francesa “jeune”, que en francés significa “joven”, y su identidad visual estará basada en el color azul, que de acuerdo a la aerolínea “simboliza una actitud dinámica así como al cielo, el espacio y viajes”. La nueva aerolínea buscará inspirar a los Millennials a desear volar con Air France en el futuro de sus vidas.
Joon comenzará a operar en el otoño europeo de este año con vuelos de medio radio desde el aeropuerto Charles de Gaulle, que será por ahora su única base prevista, para en 2018 iniciar vuelos de larga distancia. Habrán 18 aviones de la familia A320 para vuelos de media distancia y 10 del tipo A340/A350 para los de largo radio. Las rutas, horarios y tarifas se darán a conocer en setiembre.
El director de Joon, Jean-Michel Mathieu, considera que “la creación de Joon mejorará la rentabilidad del grupo Air France, permitiéndole reducir sus costes y asegurar la perennidad de su modelo económico”.
En principio, los vuelos de Joon estarán a cargo de pilotos de Air France voluntarios, sin ningún cambio en sus condiciones de trabajo ni remuneraciones. Esto quedó pactado el pasado 17 de julio con el sindicato francés de pilotos tras el cual pudo ser aprobada la creación de la marca. No obstante, se harán contrataciones externas de auxiliares de vuelo en condiciones salariales un 45% inferiores a las de Air France.