Como parte de una nota realizada por una cadena televisiva, un niño de aproximadamente 12 años de edad fue invitado a conocer por un día las actividades que realizan los pilotos de la aerolínea nacional de Argelia.
Algunos empleados de la compañía aérea habían visto con buenos ojos la iniciativa de una asociación de ayuda a niños huérfanos para que pudieran ver por primera vez un avión de verdad, e incluso volar en un pequeño viaje de ida y vuelta.
Un pequeño “piloto honorario”
Con toda ilusión, la tripulación nombró al pequeño como “piloto honorario” e incluso se le confeccionó un uniforme a medida, con las características gafas de aviador incluidas para acompañar a los pilotos durante todas las fases del vuelo: desde la preparación de la documentación a la revisión exterior del aparato; un turbohélice ATR-72-600, avión de fabricación franco-italiana, con matrícula 7T-VUT, del que Air Algerie tiene 15 unidades dedicadas principalmente a vuelos nacionales, aunque con ellos también llega a destinos internacionales cercanos como Alicante o Palma.
Acompañado siempre de una cámara de la cadena de televisión local Al Bilad TV, que preparaba un reportaje sobre esta jornada, el pequeño se convirtió en el tercer piloto del vuelo 6212 que despegó con normalidad y con el invitado sentado en el asiento de observador, un transortín situado en el centro de la cabina exactamente entre ambos pilotos, una posición usada generalmente por instructores o inspectores.
Una vez en el aire, el comandante abandonó su asiento para cedérselo al niño que escuchando las instrucciones del primer oficial hizo algunas maniobras sencillas en pleno vuelo, tal y como reconoció posteriormente el copiloto frente al micrófono de la televisión.
Y como cualquier cosa que se trasmite por cualquier medio, ese video llegó enseguida a los responsables de seguridad de la compañía e inmediatamente a la dirección general de Air Algerie que de manera preventiva sacó de la programación de vuelos a ambos pilotos, una medida disciplinaria que ha trascendido en medios de comunicación locales y especializados del sector aunque la compañía no se ha pronunciado oficialmente sobre lo ocurrido.
*Con información de La Vanguardia