Por Gustavo Galeano
Esta decisión lo convierte en el primer aeropuerto de los Estados Unidos en liberar de esta restricción puesta en marcha luego de los ataques terroristas del 11 de setiembre de 2001. Por ahora, no hay intención de extender la exención a otros aeropuertos estadounidenses.
La autoridad aeroportuaria señaló que, para acceder a este derecho, los ciudadanos deberán tramitar un permiso especial denominado myPITpass, que validará su ingreso más allá de los controles migratorios dentro de un horario que va desde las 9 hasta las 17 horas, y en una fase inicial de días hábiles, de lunes a viernes. Los acreedores de myPITpass deberán además mostrar una identificación oficial y certificar que no se encuentran en la lista de personas restringidas de volar de la TSA. Adicionalmente deberán someterse a los controles de seguridad como un pasajero más.
En casos de contingencia o ante determinados escenarios puntuales, la TSA podrá temporalmente suspender la emisión de myPITpass.
“Desde que empecé a trabajar en este aeropuerto la gente me venía preguntando acerca de poder acompañar a sus familiares hasta la puerta de embarque o poder comprar cosas o comer en el aeropuerto. Hemos trabajado conjuntamente con la TSA, complementando este programa junto con los de puertas abiertas”, dijo Christina Cassotis, CEO de la autoridad aeroportuaria del condado de Allegheny, donde está ubicado el aeropuerto de Pittsburgh.