El revoltoso pasajero James August, que había amenazado con golpear a su pareja, hijos y a otro pasajero, además de golpear a un flight attendant, se declaró culpable en febrero pasado por su conducta disruptiva, por lo que tendrá que recompensar a la aerolínea afectada Hawaiian Airlines con 100.000 dólares estadounidenses, según sentencia de un juez federal.
La suma de dinero representa los gastos que desembolsó Hawaiian Airlines por regresar el vuelo a Honolulu, incluyendo el combustible del avión, mantenimiento, tripulación en tierra, tripulación de reemplazo, valor del aterrizaje adicional, vouchers de alimentación para los pasajeros por el retraso y reparación del daño.
Durante el proceso en la corte y según las declaraciones ante el FBI, James August, dijo no recordar nada de lo ocurrido durante el vuelo HA50, pero se declaró responsable luego de mostrárseles las pruebas en su contra.