Por Ricardo Cibils
Fuimos gentilmente invitados a participar de este acontecimiento por Alejandra Noceda, del departamento de Relaciones Públicas y Prensa del aeropuerto. Fue ella misma quien ofició de maestro de ceremonia presentándonos el avión. La aeronave, que lleva por nombre de “Berta Servián de Flores”, denominada así en homenaje a la pionera mujer aviadora de nuestro país. El 172 es el tercer avión en ser totalmente reparado y puesto en marcha, ajustándose a las condiciones de aeronavegabilidad pertinentes, a fin de ser apto para la instrucción de vuelo. La matrícula que le corresponde al tercer avión es ZP-EPE.
La Directora del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil, la Magister Regina Valiente, fue la encargada de dar puntapié al acto, iniciándolo con un discurso en guaraní, dando las características del avión, y manifestando su plena emoción, y renovando su compromiso de seguir instruyendo a pilotos capacitados y con vasta experiencia para desempeñar un vuelo bajo cualquier condición de manera normal. La Magister homenajeó a Rossana Servián, familiar de Berta Servián de Flores, entregándole un arreglo floral y una foto de la misma.
La escuelita a su vez, realizó un acuerdo estratégico con el Banco Familiar, con el fin de poder facilitar a cualquier interesado que posea la ilusión y el deseo de convertirse en un aviador, la posibilidad de cumplir su anhelo. Fueron presentados los planes de financiación del curso de Piloto Aviador Civil (PAC), como también, la aviónica del avión puede ser financiada en diversos planes según conveniencia. Para mayor información, los interesados pueden acudir a la sucursal del Banco Familiar en la ciudad de Luque (elegida esta sucursal conjuntamente con la DINAC para mantener cerca el núcleo aeronáutico).
Seguidamente, el Sr. Luis Aguirre, presidente de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (DINAC), se mostró orgulloso de este logro, y de varios más que están ocurriendo a lo largo de su gestión. Por ejemplo, nos comentó que ya está en pleno funcionamiento la PBN (Performance-based navigation, lo que traducido sería como navegación basada en la performance), posicionándonos bien alto por sobre países grandes y desarrollados de la región. Acotó, que cuando inició su gestión, había una deuda pendiente de incrementar los márgenes positivos de administración, que nunca superó el 49%, y que se venía arrastrando por varios años. Actualmente, gracias a que están trabajando palmo a palmo con la OACI (Organización de Aeronáutica Civil Internacional), sometiéndose a constantes evaluaciones y auditorías, el aeropuerto hoy se ubica con un índice del 73%, superando incluso la media regional que está enclavada en el 61%.
Volvió a recalcar lo que siempre quiere enfatizar, y es que a la DINAC, a pesar de que están estrictos con el cumplimiento de las normas y las reglas, más que someter a los demás, quiere facilitar las cosas, pero siempre, poniendo en primer lugar la vida del ser humano, que es el pilar fundamental de toda operación aérea. Agradeció también el trabajo a su equipo de técnicos que día a día desarrollan y emplean mejoras para garantizar nuestra seguridad operacional. Si bien la atracción principal fue netamente la presentación del avión por parte de la INAC, no escatimó palabras para la edificación en la cual “la escuelita” centra sus operaciones, capacitando no solamente a pilotos, sino a meteorólogos, controladores de tránsito aéreo, entre otros.
Así concluyó el acto protocolar, con las fotos que retrataron la efusividad del mismo y que quedarán en la memoria de más de uno. Posteriormente, y tras una gestión encabezada por la Magister Regina Valiente, fuimos invitados dos medios de prensa especializados (Aeronáutica Paraguay y Fanáticos del Aire), a tener la dicha de poder realizar el primer vuelo de navegación a bordo del ZP-EPE, sorprendiéndonos de grata manera.
¿Cómo fue el pálpito en este vuelo demostración?
Personalmente, es la primera vez que subo a un C172, como estoy acostumbrado al Cessna C150, la diferencia es bastante amplia, y muy sensible. Nuestro vuelo de navegación consistió en ir desde el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, ubicado en la ciudad de Luque y que sirve a la ciudad de Asunción, hasta el Aeropuerto Internacional Teniente Amín Ayub G., que sirve a la ciudad de Encarnación y está situado en la localidad de Capitán Miranda.
Nos comunicamos con superficie, y se autorizó nuestro plan de vuelo. Carreteamos hasta la salida C, recibimos la autorización por parte de torre, y despegamos por la 02 por la dirección e intensidad del viento, posterior al despegue, viramos por derecha en ascenso hasta 3500 ft (ft: feet-pies).
Luego, proa al sur, lo que nos permitió sobrevolar zonas como Paraguarí, Caazapá, Pirapó, entre otras. Como íbamos con viento de cola, el viaje se hizo relativamente corto, lo que se transformó en un largo viaje al retorno. Nos comunicamos con Posadas para coordinar nuestra aproximación a Capitán Miranda, luego ya nos contactamos hasta nuestro arribo con la dependencia de Encarnación.
En nuestra aproximación, sobrevolamos la Playa Mboi Ka’e, y la playa San José, también, pasamos sobre el puente San Roque González de Santa Cruz, que une Encarnación con Posadas.
Siendo las 12:30 tocamos pista en el aeropuerto, utilizando la cabecera 20.
Permanecimos ahí un lapso de 45 minutos aproximadamente, lo cual nos permitió extender las piernas y distendernos un momento, hasta que llegó el momento de retornar a Asunción.
Fuimos autorizados a carretear a la pista 02 del Aeropuerto Teniente Amín Ayub G., despegamos y viramos por izquierda en ascenso para sobrevolar Carmen del Paraná, Coratei y Ayolas, para finalmente establecer rumbo norte y regresar. Paisajes maravillosos nos acompañaron tanto a la ida, como a la vuelta, ver la magnitud del cauce hídrico más caudaloso de nuestro país desde el aire parece sencillamente una obra hecha por el pintor más destacado que supo apreciar cada detalle.
Pudimos sobrevolar inclusive el Hotel y Granja Doña Ramonita, que alberga el Fokker F100 de Sol del Paraguay dentro de su predio. Como guinda de la torta a nuestro vuelo de exhibición, el comandante procedió a realizar una maniobra de emergencia. Luego, continuamos hasta Asunción con 3.000 ft de altura, realizando otro vuelo tranquilo y placentero.
Como comenté que el viento en el tramo de ida significó una ventaja, en el retorno el mismo factor representó una desventaja, extendiendo el tiempo de nuestro viaje un poco más, esto por un principio aerodinámico que establece que viento de frente otorga resistencia al avance.
Tras un toque y despegue en la estación, aterrizamos finalmente en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi pasadas las 15:30, marcando el final de una memorable jornada en la cual la emotividad se hizo presente, tanto en la rampa del aeropuerto como en el aire.