Por Gustavo Galeano
Semanas atrás, Latam Cargo anunciaba el retiro de sus aviones Boeing 777-200F, para concentrarse solo en 767-300F, por ajustarse estos últimos mejor a su operativa actual considerando la débil demanda en el negocio de cargas.
Según lo previsto, la versión de pasajeros del 777 también se despedirá de la flota de Latam Airlines, a razón de dos unidades en 2018 y tres más en 2019, quedando así fuera del parque la mitad de los 777-300ER de la compañía.
En contrapartida, los 4 Airbus A350-900 subarrendados a su parter en la alianza OneWorld, Qatar Airways, retornarán a la filial brasileña el próximo año, y llegarán 4 nuevos aviones desde fábrica en 2019. El primero de 14 equipos de la versión 1000 del A350 se incorporará a Latam entre 2020 y 2021, luego de los 13 de la versión 900 (serán 27 A350 en total).
En Chile, se demorará la entrega de dos Boeing 787-9 para cerrar el 2019 con 16 unidades, que sumadas a los 787-8, totalizarán 26 unidades Dreamliner en Latam Airlines.
Todavía hay 36 Boeing 767-300ER en la flota del Grupo Latam, los cuales se dieron de baja complemente de la filial chilena, pero siguen volando dentro de las demás bases del grupo, como Brasil, Colombia, Ecuador y Argentina.
Recordemos que previo a la fusión, los 787 fueron los elegidos por LAN para reemplazar a los 767 y A340, y los A350 fueron los escogidos por TAM para sustituir a sus A330 y 777, por lo que, una vez unidas LAN y TAM en Latam Airlines, se generó una superposición de familias de aviones que acelerarían el retiro de los aviones menos eficientes con miras a homogeneizar la flota combinada.