Por Gustavo Galeano
La factoría de Paine Field inició el ensamblaje de partes de las alas de nueva generación del primer 777-9X.
Y es que son las alas del 777-9X las que representan la mayor innovación, al estar hechas de materiales compuestos en lugar de aleaciones metálicas. Asimismo, la envergadura se alarga en 3,5 metros en cada semi ala, mismas dimensiones que podrán plegarse hacia arriba para facilitar las maniobras en espacios reducidos de aeropuertos, principalmente en los más congestionados de Estados Unidos.
Boeing utilizará además dos células estáticas para las pruebas de resistencia estructural y fatiga. El primer vuelo del programa 777X está previsto para el primer trimestre de 2019, con la certificación y entrada en servicio un año después con su cliente lanzamiento, Emirates.
Los 777X en sus variantes 8 y 9, se desarrollaron con un incremento en la autonomía, que se extiende hasta los 16.110 kilómetros sin paradas en el 777-9X, capacidad de entre 350 y 425 asientos, fabricación de piezas de fibra de carbono, aviónica de última generación, prestaciones más ecológicas, reducción de huella acústica, entre otras características. Los interiores tomarán elementos inspirados en los 787 Dreamliner: ventanas más grandes, cabinas más amplias, nueva iluminación, una arquitectura mejorada y más.
Motores GE9X, los más grandes del mundo para aviones comerciales, equiparán a los 777X. Serán más eficientes en consumo de combustible, y se prevé que General Electric comience sus tests de pruebas y obtenga su certificación antes de finalizar este año.
Con 76,7 metros de largo, una vez operativo, el 777-9X será la aeronave comercial más larga del mundo, superando al Boeing 747-8, que a la fecha ostenta ese título, con 76,4 metros de longitud.
Además de Emirates, líneas aéreas como Lufthansa, Qatar Airways, Cathay Pacific, ANA, Etihad Airways, y otras, han confirmado órdenes, e irán reemplazando sus aviones 777 más antiguos por los de próxima generación.
La primera versión del Boeing 777 nació hace más de dos décadas, siendo toda una revolución en aviones bimotores de cabina ancha para la época, con un rendimiento, capacidad de carga y alcance sin precedentes, lo que lo convirtió en un suceso mundial y en el preferido de las aerolíneas para operaciones transcontinentales.