Imaginá subir a un avión comercial para una vuelo de rutina, y que al llegar a tu lugar veas que tu compañera de asiento es nada más y nada menos que la súper estrella de la música, Madonna. No todos los días puede pasarte algo así, pero a los pasajeros de un vuelo de TAP, les ocurrió.
Lejos de optar por un viaje en su jet privado, la cantante lo hizo a través de TAP desde Londres, Reino Unido a Lisboa. La aerolínea portuguesa, como la mayoría de las líneas aéreas tradicionales, para sus vuelos cortos en aviones de la familia A320/B737 no dispone de clase ejecutiva, solo de clase económica plus con el asiento central bloqueado.

Los pasajeros de ese vuelo no podían creer que estaban compartiendo el mismo avión y respirando el mismo aire que la artista, que estaba vestida con atuendo casual, a cara lavada y sin levantar la mirada de la pantalla de su teléfono celular.
Informa Daily Mail, que Madonna viajó a la capital británica para pasar unos días con su hijo Rocco, que reside en Londres con su padre, el director Guy Ritchie.
La cantante de “Like A Virgin” divide ahora su tiempo entre Portugal, Estados Unidos y Gran Bretaña, después de que su hijo adoptivo nacido en Malawi, David Banda, se uniese a los juveniles del club de fútbol Benfica a principios de este año.