Por Gustavo Galeano
La cancelación del programa Falcon 5X se produjo después de que Dassault confirmara durante la exhibición de aviación ejecutiva más grande del mundo NBAA 2017, hecha en Las Vegas, que las fallas en los motores producidos por Safran Aircraft Engines para el avión de largo alcance presentaran resultados poco satisfactorios que harían inviable la continuidad del mismo.
El Falcon 5 tendría que haber entrado a servicio ya en 2015, pero presentó constantes retrasos debido a anomalías en el compresor de alta presión del turbofan Silvercrest. El elegante jet ejecutivo hubiera tenido la primera ventana tragaluz de techo en un avión corporativo, así como un sistema de entretenimiento de última generación y tecnología de estabilización para asegurar un vuelo tranquilo y agradable con capacidad para hasta 14 pasajeros con un alcance de 9.630 kilómetros sin paradas y una velocidad máxima de 957 kilómetros por hora.
Por ahora, todo hace suponer que Dassault rebautizará el proyecto bajo otra nomenclatura y rediseñará la nave con motores Pratt & Whitney PW600, pero habrá que esperar.