La aeronave cuatrimotor de fabricación estadounidense con matrícula G-APFE, había llegado ese mismo día a las 12:40 desde el aeropuerto de Fukuoka, a donde se desvió la jornada anterior por malas condiciones meteorológicas en la capital japonesa.
El próximo segmento al mando del capitán Bernard Dobson, de 45 años, comprendería el tramo de Tokio a Hong Kong. A las 13:58, el jet despegó con rumbo suroeste, encontrándose minutos después con implacables turbulencias, causando que se rompiese su estructura en vuelo y chocara contra un bosque, falleciendo los 113 pasajeros y 11 tripulantes a bordo. El avión dejó un campo de escombros de 16 kilómetros de largo.
Investigación
Los restos permitieron a los investigadores determinar que el estabilizador vertical del 707 falló, dejando marcas de pintura que indicaban que se rompió del lado izquierdo y luego hacia abajo. Después, la aleta ventral y los cuatro soportes de los motores cedieron debido a un exceso de tensión, seguida por el resto del empenaje. Posteriormente, la aeronave entró en un giro plano, con la sección del fuselaje hacia adelante y el ala de estribor exterior rompiéndose poco antes del impacto con el suelo.
Aunque se encontró agrietamiento por tensión en los orificios del perno del estabilizador vertical, se concluyó mediante pruebas que ello no contribuyó a la falla estructural. Aún así, fue potencialmente un problema importante de seguridad de vuelo. Las inspeccione rutinarias de los Boeing 707 y Boeing 720 similares, como resultado de este descubrimiento, revelaron que este era un inconveniente común, y los mantenimientos correctivos en las flotas de las aerolíneas eventualmente siguieron.
El informe concluyó que “el avión se topó con una turbulencia anormalmente severa sobre la ciudad de Gotemba, que impuso ráfagas considerablemente superiores a los límites de diseño”.
Fue el tercer accidente fatal de una aerolínea de pasajeros en Japón en un mes, luego del colapso del vuelo 60 de All Nippon Airways (ANA) el 4 de febrero y del vuelo 402 de Canadian Pacific Air Lines ocurrido tan solo el día anterior.
Las víctimas incluyeron a un grupo de 75 estadounidenses asociados con la empresa Thermo King de Minneapolis, Minnesota, en una gira patrocinada por la compañía durante dos semanas en Japón y el sudeste asiático. Había 26 parejas viajando juntas en el grupo, y un total de 63 niños quedaron huérfanos como resultado del accidente.