Por Alberto González
Gustavo Sartore, de tan solo 22 años, se nos presentó como un joven que vivía en el barrio Mburucuyá de la capital paraguaya, para luego indicarnos que como otros paraguayos en el extranjero, también estaba trabajando en el sector de la aviación, específicamente en el departamento de TOWING en el aeropuerto de Barajas, España. Este departamento (como el mismo lo indicó y detalló) no es muy conocido y lo resume así:
“El trabajo trata de ir como piloto de seguridad durante los carreteos de parking a parking o de terminal a terminal. Encendemos el APU, el HYD, chequean frenos, hablamos con torre y todo lo que haga falta para la seguridad de carreteos. Trabajamos con Iberia, Vueling, Finnair y British Airways.”
Queriendo saber más detalles de como llegó siendo tan joven a un puesto tan exigente, le realizamos una serie de preguntas que tratan de resumir su interesante historia.
– ¿Cuál es tu formación? ¿Provenís de una familia ligada a la aviación?
Actualmente tengo 22 años. Llegué a España en el 2015 y empecé a trabajar en una escuela de aviación en Cuatro Vientos, Madrid, que es donde están la mayoría de escuelas. Estaba en el departamento de drones (parte teórica y práctica). Ahí empece a estudiar para PPL y pude terminar la parte teórica por lo que solo me faltan completar las horas de vuelo. Solo la pareja de mi mamá es piloto privado aficionado y gracias a él aprendí muchísimas cosas. Los estudios que tengo son: Técnico en Opps Aeroportuarios, y algunos “Grados” como lo dicen acá en: meteorología, navegación y cartografía. También tengo cursos específicos que fui adquiriendo en todos los trabajos dentro del aeropuerto como por ejemplo: World Tracer, Amadeus, mercancías peligrosas, etc.
– ¿Trabajaste previamente en alguna aerolínea? ¿qué funciones cumpliste?
Estuve 4 meses como Operario de Rampa en Iberia. Se divide en dos sectores: Muelles y Pista. Yo estaba en pista dando asistencia a los aviones que tenían acuerdo con Iberia Handling y 2 meses en Aerolíneas Argentinas como Flight Dispatcher.
– ¿Cómo llegaste a trabajar en tu actual puesto? ¿Cómo fue el proceso de selección?
Por caradura prácticamente, mientras estaba estudiando para Técnico Aeroportuario, tuve que renunciar al trabajo de drones por problemas internos, por lo que estuve dos meses buscando trabajo hasta que encontré una oferta que decía “Carreteador de Aviones”. Cuando me puse a ver los requisitos eran muy diferentes a lo que me esperaba. Pedían: -Ser TMA con licencia EASA -Experiencia de 2 años en el sector -Amplio conocimiento de A320 y una serie de cosas que no acuerdo, pero aun así, probé suerte y me apunté. Me llamaron para la entrevista pidiendo todos mis estudios y una prueba en inglés. Aclaro que hasta ese entonces ni idea de que trataba el puesto ni donde me estaba metiendo. Una semana después vuelven a contactar conmigo para la entrevista pero esta vez con los jefes del departamento, fue prácticamente lo mismo que la entrevista anterior pero con un pequeño examen personal y sobre conocimientos del A320 en inglés. Fue en esa entrevista que me aclararon que el puesto era ir como piloto de seguridad durante los carreteos de la flota de Iberia.
– ¿Cómo es el proceso de entrenamiento para llegar a trabajar en este departamento?
Cuando ya quedamos los seleccionados, nos hicieron un curso intensivo de habilitación de cabina para los A319/320/321 en el aeropuerto y las pruebas correspondientes para tener las tarjetas que dan acceso al aeropuerto que se llaman AVSEC y PCP (Permiso de Conducir en Plataforma). Fue una semana muy dura aquella.
– ¿Cómo es el día a día en tu jornada laboral? Entiendo que no es un trabajo rutinario.
Hay varios turnos, pero en donde hay más trabajo es el del turno de las 01:30 AM hasta las 08:00 AM. En estos turnos siempre somos 3 personas (2 carreteadores y 1 chofer). Hay noches en las cuales tenemos 12 o 14 movimientos, por lo que esas noches se nos pasan rápido. Siempre existe el peligro de algún pequeño incidente, como ya ocurrió varias veces, pero son ajenos a nuestro trabajo, como por ejemplo golpear la punta del plano con una escalera, golpear el motor con una pasarela, dejar un vehículo sin frenos de mano y se estrelle contra el motor y así. Durante el resto del día puede ser mas tranquilo ya que los aviones siempre están en el aire, aunque como siempre, hay días en los cuales extrañás a tu compañero, ya que por la mañana casi siempre hay una sola persona.
– ¿Para trabajar en este departamento que tipo de perfil se necesita?
Según lo vivido te puedo decir que mientras mas estudios sobre aviación tengas, más posibilidades vas a tener ya que como yo, hay varios compañeros que tampoco son TMA’s, y aun así están ahí. Para este departamento al menos puedo aclarar eso.
– ¿Cuáles son los aspectos positivos y negativos del trabajo?
Para un amante de los aviones como yo, creo que es el mejor trabajo que puede haber, sin contar con el de ser piloto, ya que estás en contacto 100% con los aviones, coordinación y torre de control. Lo negativo pueden ser los horarios, ya que como la mayoría de los que trabajamos en el aeropuerto tenemos dos trabajos, a veces pasamos casi dos días fuera de casa y sin dormir. Esa sin duda es la parte más dura.
– ¿En el aspecto familiar, te da tiempo de estar con tu familia?
Vivo con mi esposa y mi hija de 2 añitos, y a veces como he comentado antes, casi no las veo o cuando estoy en casa tengo que dormir para las siguientes dos o tres jornadas. Aclaro también que tengo otro trabajo al mediodía, y es como conductor de tripulaciones de Iberia, por eso el problema con los horarios, y si me preguntás por mi familia de Paraguay (abuela, hermano, tíos y amigos), hace 3 años casi que no voy y no veo la hora volver a pisar mi hermosa tierra.
– ¿Qué recomendás a quienes quieran trabajar en esta área de la aviación?
Si tienen una oportunidad como esta, como en mi caso, no desaprovechar y si es lo que te gusta, esforzarte al máximo para sobresalir positivamente del resto. La aviación es muy dura y por eso este consejo.
Para finalizar la entrevista, desde Aeronáutica Paraguay deseamos todo el éxito posible en su carrera que sin dudas recién está arrancando y que siga dejando bien en alto a los profesionales paraguayos.