La firma todavía no develó el que será su logo ni la librea de sus aviones, lo cual continuará como un misterio hasta el próximo 16 de octubre, fecha en la que Paranair despegará como tal, asumiendo la malla actual de Amaszonas Paraguay, incluyendo un nuevo certificado de operador aéreo, en proceso de tramitación ante la DINAC.
Según el gerente general de Paranair, Rómulo Campos Krauer, la línea aérea mantendrá su red vigente, que comprende frecuencias regulares desde el aeropuerto Silvio Pettirossi a Ciudad del Este, Montevideo, Iquique, Buenos Aires, Salta, Sao Paulo y Curitiba, así como los de temporada a Punta del Este, Florianópolis y Río de Janeiro. Todas las rutas son cubiertas con equipos Bombardier CRJ200 de 50 asientos.
En el comunicado oficial del cambio de marca, Amaszonas Paraguay dijo que: “Se ha escogido el nombre de Paranair pensando en la vocación de conectar países y acercar personas, tal y como tradicionalmente los ríos han comunicado y comunican regiones enlazadas por su cauce. La denominación resulta una clara evocación del río Paraná, uno de los ríos más largos de Sudamérica y de nuestro país. Además, su curso coincide con los territorios estratégicos de la compañía: desde su nacimiento en Brasil, su confluencia con los ríos Paraguay y Uruguay y su desembocadura en el estuario del Río de la Plata en Argentina.”
Paranair, como de hecho lo hace Amaszonas Paraguay hoy, seguirá siendo la aerolínea con mayor cantidad de rutas desde el país. En 2017, transportó 100.786 pasajeros.
Por parte, sus ex socias, Amaszonas Línea Aérea de Bolivia y Amaszonas Uruguay, siguen volando Asunción de forma independiente desde Santa Cruz de la Sierra y Montevideo, respectivamente.