Desde hace un tiempo atrás, Iberia se encuentra renovando su flota de aviones de largo recorrido. Ya solo quedan algunos Airbus A340-600, mientras que los A340-300 fueron todos discontinuados y reemplazados por A330-200 de fábrica mientras paralelamente se reciben los nuevos A350-900 XWB.

En función de lo anterior, de los seis A340-300 de los que disponía, uno acabó en Teruel, otro en Castellón (propiedad de KP Aviation) y cuatro en plataforma del aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid-Barajas.
El primero de ellos en ser desguazado fue el que portaba la matrícula EC-GJT, luego de ser retiradas del aparato todas las piezas útiles. Mientras esto sucedía, parte del avión sufrió un incendio, probablemente debido a la presencia de líquidos inflamables que no han terminado de apartarse del aparato, pero las llamas fueron rápidamente sofocadas por el Cuerpo de Bomberos del aeropuerto madrileño.

La dificultad de colocación de estos aviones cuatrimotores en el mercado de segunda mano, llevaron a Iberia a tomar la decisión de darles un mejor uso como fuente de partes antes que pretender una venta o arrendamiento a otras compañías aéreas.
