Recientemente había circulado en redes sociales un vídeo casero filmado en el aeropuerto de Fernando de Noronha, Brasil, en donde se observa a un Boeing 737-800 de GOL interrumpir su aterrizaje tras percatarse que otra aeronave aún se encontraba en pista.
Algunos medios digitales llegaron a publicar artículos con títulos muy exagerados como si fuera que se había evitado una gran tragedia. Pero la verdad es totalmente diferente a la que estos medios tradicionales quisieron hacer llegar a sus lectores.
Primero, analicemos el aeropuerto de Fernando de Noronha. Está ubicado en el archipiélago brasileño de Fernando de Noronha, en el océano Atlántico; sus códigos aeroportuarios son FEN (IATA) y SBFN (ICAO) respectivamente. Posee una pista única cuya longitud es de 1.840 metros. A diferencia de los grandes aeropuertos, este no cuenta con un taxiway, utilizado para el rodaje de las aeronaves, tampoco posee una torre de control.

Cómo es un pequeño aeropuerto en una pequeña isla, todas las informaciones son enviadas a la tripulación de cada vuelo desde el aeropuerto de Recife. Entonces, son los propios pilotos que deciden por cuál cabecera van a aterrizar. Además, como no cuenta con una torre de control, los pilotos mantienen la comunicación a través de una frecuencia de radio especifica que en la aviación recibe el nombre de “coordinación”. Esto implica que el piloto debe de estar comunicando todo los procedimientos que está realizando, tales como la posición en donde se encuentra, que es lo que va a realizar, etcétera.
El avión de Azul, el que había aterrizado antes por algún motivo llegó con atraso a Fernando de Noronha; entonces, como el aeropuerto no cuenta con taxiway, toda aeronave que aterriza por la cabecera 12 debe de efectuar un procedimiento llamado “Backtrack” para poder ingresar a plataforma, esto significa que al llegar a la otra cabecera (30), la aeronave debe dar vuelta para taxear por la misma pista que había aterrizado para ingresar a la zona de la terminal. Este mismo procedimiento se realiza en el aeropuerto de Ciudad del Este, Paraguay, y varios otros, por ejemplo, ya que al igual que el aeropuerto de Fernando de Noronha, no cuenta con una taxiway .

Los pilotos de la aeronave de GOL siempre estuvieron al tanto sobre el aterrizaje del avión de Azul, como también que estaban realizando el procedimiento de backtrack. Por lo tanto la aeronave de GOL siguió adelante con el aterrizaje confiando en que el avión de Azul iba a abandonar la pista antes de que ellos aterricen; pero como tardó en hacerlo, la tripulación de GOL decidió realizar el procedimiento llamado “Go-around”, que consiste en interrumpir el aterrizaje, volver a elevarse e intentar nuevamente un aterrizaje seguro. ¡Ojo! este procedimiento es totalmente normal en la aviación.
En síntesis, nunca ambas aeronaves estuvieron en peligro de colisión, fue un secuencia totalmente controlada que se observa en todos los aeropuertos del mundo.