Ayer lunes 8 de abril, en un hecho considerado como ‘llamativo’ para la industria aerocomercial, la línea aérea iraní Mahan Air llegó a Caracas, Venezuela, en su vuelo inaugural sin escalas desde Teherán, Irán.
Resultan difíciles de comprender las razones comerciales, si las hay, para la apertura de esta operación, teniendo en cuenta la calamitosa situación política y social por la que atraviesa el país caribeño y la prácticamente inexistente posibilidad de resultados financieros en una ruta tan inusual. El primer vuelo se llevó a cabo con un cuatrimotor Airbus A340-600 de 308 asientos en dos clases.

Mahan Air es la primera y mayor compañía aérea privada iraní. Es además controversial mediáticamente hablando, pues fue acusada años atrás de transportar equipamientos militares a zonas de guerra. Por esta razón, y por el país del cual proviene, su arribo a Sudamérica encendió la alerta en occidente, principalmente para el gobierno estadounidense.
Marco Rubio, senador estadounidense del estado de Florida, fue el primero en manifestarse.
Según reportó la agencia iraní Meher, un portavoz de la autoridad aeronáutica de ese país comunicó que entre los primeros pasajeros se encontraban funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, quienes se disponían a llevar adelante reuniones con funcionarios venezolanos acerca de la actual crítica situación a nivel macro del país sudamericano.
Al no existir una oficialización regular de esta ruta, se presume que el vuelo de ayer se trató de una operación exploratoria, aunque una delegación de la firma aérea está ahora mismo en la capital venezolana negociando las condiciones para el mantenimiento no solo estacional de la conexión.

Recordemos que años atrás, con el ex presidente venezolano Hugo Chávez todavía vivo y en el poder, la aerolínea estatal Conviasa, mantenía vuelos entre Caracas y Teherán vía Damasco, capital de Siria, en la denominada “ruta del terror”, en una clara intención de ofrecer un mensaje ofensivo hacia los Estados Unidos, aún si estos se concretaban con aviones casi vacíos o con pasajeros de gobiernos de los tres países involucrados que no abonaban por los boletos. Asimismo, habían versiones que en esos vuelos se transportaban dinero, armas y militares ilícitamente.
Mahan Air fue fundada en 1993, cuenta con una red de 26 destinos nacionales y 40 internacionales. Tiene vetados vuelos a Alemania y Francia por presuntamente transportar material bélico. Su flota la componen seis Airbus A300-600, ocho A310-300, cinco A340-300, un Boeing 747-300 y 10 BAe 146 Avro RJ.