La inversión supera los 800 millones de dólares y tiene como finalidad posicionar aún más al “Hub de las Américas” como referente en conectividad en el continente. Su principal operador, Copa Airlines, tiene más de 80 destinos y una flota de 100 aeronaves con base allí.
La Terminal 2 (T2) del aeropuerto internacional de Tocumen comenzó a construirse en marzo de 2013 con miras a mejorar la infraestructura y acompañar el crecimiento económico y logístico de Panamá. Fueron habilitadas ya cinco nuevas puertas de embarque, y en los próximos meses serán inauguradas 15 más.

La apertura de las puertas de la nueva terminal, un edificio de 116.000 metros cuadrados, diseñada por el prestigioso arquitecto británico Norman Foster, se concretará en la medida que se vayan “avanzando, calibrando todos los sistemas”, en un proceso que “va a llevar hasta la mitad del año”, dijo un portavoz de la principal terminal aérea panameña. La misma tendrá, en su conjunto, 20 nuevas mangas, 54 posiciones de contacto con aeronaves y 12 posiciones remotas entre ambas terminales.
La terminal antigua funciona sobrepasada en capacidad, ya que fue concebida para atender a 12 millones de pasajeros anuales, y hoy pasan por sus instalaciones alrededor de 16 millones.

La puesta en servicio de la T2 “va a ser una válvula de alivio en nuestras operaciones, y también parte de un ratio de crecimiento que anticipa que para el 2023 tendremos unos 25 millones de pasajeros entre las dos terminales”, agregó el responsable del mayor aeropuerto de Panamá.
La industria de la aviación representa el 14,8 % del producto interno bruto (PIB) de Panamá y genera 260.000 empleos directos e indirectos en el país centroamericano, según datos de un estudio de la Oxford Economics presentados a finales de 2017 por la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA).
