El fabricante canadiense de aeronaves Bombardier (TSX: BBD.B) confirmó el cierre de la venta previamente anunciada de los activos de su programa de aviones turboprops Q (incluyendo el Q400 en producción y licencia por los Q100/Q200/Q300) a De Havilland Aircraft of Canada Limited (anteriormente llamada Longview Aircraft Company of Canada Limited), una filial de Longview Aviation Capital Corp. por unos 300 millones de dólares americanos. Se espera que luego de asumir pasivos, comisiones y ajustes contables, el negocio se concrete en unos 250 millones de la misma moneda.

Longview llevará a cabo la producción de aviones Q400 en las instalaciones de Downsview en Toronto, y continuará prestando servicios de posventa para aviones de la serie Q. Bombardier colaborará en la transición y transferirá propiedad intelectual a Longview para facilitar una operación controlada del programa de aviones Q.