Extraoficialmente, en pleno mes de junio, donde la ocupación comienza a elevarse paulatinamente considerando la cercanía con el receso de invierno, Avianca, Copa Airlines y GOL cancelarían algunos vuelos a nuestra principal terminal aérea, dada la baja ocupación estimada para una considerable cantidad de vuelos.
Avianca y Copa Airlines, según fuentes no reveladas, nos hacen constatar que ambas reducirán sus vuelos, probablemente esto se deba a una baja ocupación sostenida, puesto que Copa Airlines suprimirá 12 de sus vuelos desde Ciudad de Panamá a lo largo de junio, mientras que Avianca tres vuelos programados en la ruta entre Lima y Asunción. Por su parte, GOL, suspenderá para este mes tres frecuencias entre Sao Paulo y Asunción.

Esto sin mencionar que Latam Airlines ya no está volando todos los días entre Asunción y Buenos Aires, lo hace cinco veces por semana desde abril. No tenemos registros históricos de que la compañía haya alguna vez operado menos de una vez al día hacia la capital argentina.

Pese al crecimiento del tráfico aéreo de Latinoamérica, Paraguay está estancado en un paupérrimo porcentaje en comparación al resto, mostrando una débil promoción de nuestra marca a nivel internacional para captar turismo, lo cual repercute en cancelaciones de vuelos por la baja ocupación de los mismos. A esto, se le suman las elevadas tasas aeroportuarias y los incentivos insuficientes para que distintas aerolíneas operen en nuestro aeropuerto, a fin de que las rutas resulten beneficiosas para ambas partes, tanto para el Estado como para las compañías aéreas.

Bien lo relató Gustavo Galeano en un artículo ayer, no es suficiente brindar soluciones a corto plazo, siendo que se debe brindar las facilidades y a su vez lograr conseguir conexiones que beneficiarían al pasajero, no solamente paraguayo, sino de todo aquel que use nuestro aeropuerto. Paraguay debe apostar a incentivar primordialmente el turismo, en pocas palabras, debemos aprovechar y promocionar lo que tenemos, al posicionar un país como destino turístico, la misma suele derivar en más rutas de vuelo que nos permitiría evitar escalas en otros aeropuertos, materias pendientes sería lograr vuelos non-stop con Miami, y Bogotá, ciudades que carecen de vuelos sin escalas desde el Silvio Pettirossi.

Hay que pulir diversas políticas que a la fecha nos impiden tener mayor soberanía aérea, y posicionarnos como destino de referencia, evitar que nuestro aeropuerto y el país sean ‘de paso’ para la mayoría de los pasajeros, incentivar a las aerolíneas no solamente en lo básico, motivar a viajeros a arribar a nuestro país sin mayor burocracia (evitando visas, por ejemplo), entre otras.
Una evaluación más exhaustiva de la realidad aerocomercial nacional, puede ser leída en este editorial.
En su momento, Paraguay tuvo dos vuelos diarios a Panamá, con Copa Airlines, hasta llegaron a ser 18 frecuencias semanales, en temporada alta. Lo mismo Avianca, que si bien el enlace ya era realizado diariamente, realizó un upgrade del Embraer 190 al Airbus A320, representando un incremento en la oferta de asientos, y nuestro aeropuerto debe proveer de pasajeros a las aerolíneas.