El fabricante estadounidense Boeing retrasó el vuelo debut del primer 777-9, debido a inconvenientes imprevistos con los compresores de los motores GE9X. Se estima que finalmente el acontecimiento tendrá lugar antes de que termine este año. No obstante, la empresa completó varias pruebas de rodaje de la aeronave demo. De hecho, la propia ceremonia de presentación de la aeronave para la prensa fue suspendida luego del veto de vuelo a la familia 737 MAX tras dos graves accidentes; pero sin embargo, colaboradores de Boeing pudieron verla.
La falla detectada debe ser subsanada por General Electric, proveedor de los motores. El presidente de GE dice que el problema está identificado y la solución en curso. Mientras esto ocurre, Boeing efectuó varios tests de taxeo al 777X a diferentes velocidades sobre la pista de la factoría de Everett. Asimismo, días pasados, los motores han funcionado a máxima potencia durante siete horas seguidas.

A Boeing comienza a preocuparle el calendario de pruebas que General Electric debe seguir para certificar el motor antes del primer vuelo, ya que los plazos podrían alargarse hasta inclusive primeros meses de 2020. El compromiso de Boeing con los clientes era el de iniciar las primeras entregas a mediados de 2020, pero muy probablemente esto no será así.

Lufthansa y Emirates, las primeras que lo recibirán, y Qatar Airways ya han señalado que esperan retrasos en las entregas, por lo que están haciendo planes para mantener en servicio algunos aviones que pensaban retirar con la llegada de la nueva generación del triple siete. Al mismo tiempo, Emirates estaría negociando con Boeing alargar el período de entrega de los 150 ejemplares que tiene pedidos, e incluso cambiar parte de ellos por 787.