Ayer martes 20 de agosto, un Airbus A330-300 de la compañía Evelop, procedente de las Islas Mauricio, tras pasar por una zona de fuertes turbulencias, tuvo que solicitar la asistencia de los servicios médicos del aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid-Barajas, que sirve a la capital española. El aparato sufrió una pérdida repentina de altura, cayendo en picada aproximadamente durante 15 segundos. Logró aterrizar sin incidentes a las 19.15, hora de España.
Según informa la compañía, el piloto ya había avisado de que iban a pasar por zonas con turbulencias, activando también la señal indicativa de uso de los cinturones de seguridad. Posteriormente el comandante comunicó a los controladores aéreos la necesidad de asistencia una vez aterrizados.

En total se reportaron 35 heridos, de los cuales el Samur (servicio de emergencia de Madrid) trasladó a 14 pasajeros a diferentes centros médicos de la comunidad. Los heridos presentaban diferentes contusiones, traumatismos y pequeños cortes en la cabeza y cuerpo, según informan diferentes medios locales.