Este insólito hecho tuvo lugar en el zeropuerto Internacional de Changi en Singapore, en donde un hombre compró un pasaje aéreo para poder ingresar a la zona restringida de partida y así poder despedirse de su esposa que viajaba. Pero para la mala suerte del hombre, este tipo de hechos son severamente castigados según las leyes de este país.

El hombre de 27 años que no fue identificado puede afrontar hasta dos años de cárcel y una multa de hasta 20.000 dólares por violar la ley de seguridad. Según la misma, las personas con una tarjeta de embarque solo pueden ingresar a la zona de tránsito si es que tienen intenciones de viajar. Para las autoridades aeroportuarias de Changi, estas áreas son catalogadas como una protegidas, por lo que las personas que accedan a ellas sin la finalidad de volar son acusadas en virtud de la ley de “Protección de Infraestructura”.

Según las mismas autoridades, ya son 33 personas las que fueron arrestadas en lo va del año por la misma causa.