El fabricante estadounidense que ha tenido varios percances este año, va incrementando sus esperanzas para retomar las operaciones del 737 MAX, cuya flota global está varada en tierra desde marzo pasado por decisión de la FAA y otros entes reguladores globales, producto de las dos tragedias con este tipo de avión sucedidas en Indonesia y Etiopía con pérdida total de vidas.

Alta es la ilusión de parte de Boeing que sus aviones vuelvan al ritmo normal de sus operaciones, por lo que varios estudios fueron realizados a lo largo de este tiempo por el software de la aeronave. Esta vez, la compañía fabricante de aeronaves prepara “kits” para ingenieros que actualizarán dicho software, una ayuda para aquellos profesionales de la ingeniería que estarán a cargo para que esta máquina vuelva a surcar los cielos.
De acuerdo con gente cercana a Boeing, la empresa norteamericana destinó a cerca de 1500 ingenieros para el desarrollo de estos kits. Luego de estas entregas, Boeing y aerolíneas a nivel mundial deberán trabajar en tres lugares distintos: aviones ya construidos, pero que no fueron entregados por parte del fabricante y que se encuentran en varios hangares de EEUU, que son apróximadamente 250 aeronaves; aviones que se construirán ya con una nueva actualización del software; y aeronaves de aerolíneas que están en tierra desde aquella decisión mayor, que ronda un número de 400 aviones.

No obstante, cabe recalcar que no se espera una definición unánime por parte de las autoridades que rigen la seguridad en la industria a nivel mundial. Cada aerolínea tomará la decisión, luego de sus propias pruebas, para poner de nuevo en marcha sus aeronaves después de la recertificación.
“No controlamos esa línea de tiempo, vamos a trabajar con los reguladores y estamos avanzando. Pero si esa fecha de regreso al servicio cambia, afecta a todo lo demás”, señaló Dennis Muilenburg, CEO de Boeing.
Es importante resaltar que una vez que estas aeronaves vuelvan a certificarse, tomaría alrededor de 100 a 150 horas de vuelo por avión para pruebas antes de sus operaciones comerciales, lo que incurriría de nuevo en un costo elevado para las usuarios.

Boeing espera que finales de este noviembre de este año, los polémicos 737 MAX vuelvan a encender motores para en 2020 retornar a los cielos.