La cartera de pedidos de Boeing por el 787 Dreamliner se redujo en 14 unidades, ya que la aerolínea rusa Aeroflot con base en Moscú, canceló su orden de 22 aviones: 18 787-8 y cuatro 787-9, operación valuada en 5.5. billones de dólares a precios de catálogo. El motivo de la rescisión no fue relevado.
Boeing ha estado buscando nuevos clientes del 787 para garantizar mantener la tasa de producción de 14 aparatos por mes, ya que el flujo de efectivo es vital con ese programa tras el veto de operaciones a la familia 737 MAX.

A la fecha, Boeing tiene 1.450 pedidos de Dreamliners hasta septiembre, con 894 en servicio, es decir, hay 556 aún por entregar. El constructor de Seattle deberá conseguir nuevos encargos por ese avión para evitar el recorte de la cadena de producción hacia 2021 o 2022.
Ayer, Boeing reportó sus entregas de aviones comerciales, de defensa y satélites del tercer trimestre del año.