La Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA) emitió una Directiva de Aeronavegabilidad para operadores de aeronaves Boeing 787 Dreamliner en sus variantes -8, -9 y -10 por potencial riesgo en climas fríos.
El requerimiento es que los pilotos no deben retraer los flaps de la aeronave luego de aterrizar en condiciones de nieve, hielo o aguanieve. La misma orden solicita además inspeccionar los slats y flaps luego del descenso.
“Boeing descubrió que la operación de los slats de los 787 podría verse afectada por el hielo en invierno. El problema es hipotético y nunca ha ocurrido en servicio. La probabilidad de que suceda es muy remota“, dijo Boeing en un comunicado.
El constructor de Seattle abordó el problema en un boletín de servicio meses atrás y se encuentra desarrollando un cambio del actuador o sensor para que los usuarios identifiquen y solucionen la situación.

En el comunicado, Boeing, declaró: “Adicionalmente, estamos brindando instrucciones para la inspección anual del sistema de slats, enfatizando los procedimientos existentes asociados con las operaciones en invierno, proporcionando procedimientos de mantenimiento extras para la verificación de los slats”.
“Esta condición, si no se toma en cuenta, podría resultar en un levantamiento insuficiente, resultando en la incapacidad de mantener un vuelo y aterrizaje seguros y continuos”, menciona la AD de la FAA.
Después de aterrizar en nieve o hielo, el personal de tierra debe retraer los flaps solo después de inspeccionar los slats y flaps para asegurarse de que no estén obstruidos por hielo, nieve. A continuación, se deben probar los slats moviendo la palanca de control de los flaps y confirmando la posición del slat.