Informa nuestro medio aliado Aviacionline, que el pasado 23 de diciembre, la tripulación del vuelo AU2260, que cubría la ruta entre Buenos Aires-Ezeiza y Asunción, Paraguay, con una aeronave Embraer E190, detectó y reportó un caso de trata de personas, que culminó con la intervención de las autoridades y el rescate de la víctima.
Según confirmó el director del aeropuerto internacional Silvio Pettirossi, tripulantes de un avión de Austral, se percataron de la actitud sospechosa de una pareja de nacionalidad argentina que estaba a bordo, por lo que se comunicaron con el área de seguridad de la terminal aérea de Luque y avisaron a la Policía local.
El hecho fue confirmado por el Grupo Aerolíneas Argentinas, detallando que un pasajero informó a la tripulación de cabina haber visto una situación “extraña” al momento de realizar el check-in entre una mujer y un hombre que se encontraban en el vuelo.
“Fue entonces que la Comisario a cargo del vuelo se acercó a la mujer, la cual no hablaba y se comportaba de forma errática. Del mismo modo, se le preguntó al hombre que la acompañaba quien era y que relación los unía. Dando este versiones distintas en dos instancias diferentes.
La tripulación decidió entonces llevar a la mujer a la parte delantera del aparato, donde se le pidió el documento, el cual no tenía consigo. Según el relato de una de las tripulantes, la mujer seguía sin emitir palabras y se encontraba en un evidente estado de tensión nerviosa, por lo que la Jefa de Cabina, en conjunto con el Comandante decidieron llamar al Servicio Médico de la Compañía y a personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
Finalmente, los pasajeros tuvieron que ser desembarcados reprogramándose el vuelo para las 12.55 del mediodía y la Jefa de Cabina radicó la denuncia en la dependencia de la Policía de Seguridad Aeroportuaria del Aeropuerto Internacional de Ezeiza. La investigación continúa”.

Desde la empresa destacaron que en 2014 firmaron un convenio de cooperación y asistencia con el Ministerio de Justicia, Aeropuertos Argentina 2000 y los gremios aeronáuticos.
Esta no es la primera vez que personal de Aerolíneas Argentinas y Austral detectan casos de trata de personas a bordo. En 2014 fueron recatadas seis mujeres que volaban entre Buenos Aires y Punta del Este, mientras que con anterioridad se detectaron casos en Ushuaia y Río Grande.
La trata de personas es una forma de esclavitud. Implica el comercio de seres humanos con fines de explotación. Esta explotación puede tomar diferentes formas: prostitución, trabajo forzado y en condiciones de servidumbre, matrimonio forzado, sustracción de órganos.
Las Estimaciones Globales 2017 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) indican que unas 24,9 millones de personas están actualmente obligadas a trabajar bajo amenaza o coerción como trabajadoras domésticas, en obras de construcción, en fábricas clandestinas, en granjas y barcos de pesca, y en la industria del sexo. Se estima que 15,4 millones de personas viven en matrimonio forzado. Esto equivale a aproximadamente 5.4 víctimas de la esclavitud moderna por cada mil personas en el mundo.
La industria de la aviación es uno de los principales modos de transporte utilizados por los traficantes, por lo que es probable que el personal de las aerolíneas se encuentre cara a cara con las víctimas o los perpetradores. La OACI recomienda que cada operador aéreo desarrolle un conjunto de políticas, procedimientos y protocolos de informes específicos para cuando ocurran tales encuentros. Se debe proporcionar capacitación especializada a la tripulación de cabina, ya que serían un primer punto de reconocimiento a bordo, junto con los miembros de la tripulación de vuelo, ya que serían el primer punto de reportar casos sospechosos de trata a las fuerzas del orden.