En diciembre pasado, Embraer completó con éxito una serie de pruebas de lanzamiento de carga con el C-390 Millennium. Las pruebas condujeron a la extracción de cargas pesadas de gravedad utilizando los métodos CDS (Sistema de entrega de contenedores) y LVAD (caída de aire a baja velocidad). Las pruebas tuvieron lugar el 27 de diciembre y fueron realizadas por Embraer, en cooperación con la Fuerza Aérea Brasileña junto con el Ejército de Brasil, en las instalaciones del Ejército de los EE.UU. en Yuma Proving Ground, Arizona.

En dichas pruebas, se lanzó una plataforma con un peso máximo de 19 toneladas (42,000 libras), así como dos plataformas con un peso total de 24 toneladas. En base a estos resultados, el C-390 Millennium se convierte en el único avión de transporte militar táctico de tamaño mediano capaz de tal operación. El Millennium tiene un sistema de manejo y lanzamiento de carga en vuelo totalmente automatizado, que requiere un solo maestro de carga, que puede realizar todas las actividades, reducir la carga de trabajo y aumentar la conciencia de la situación. Para los pilotos existe un sistema llamado Punto de Caída Calculado de Forma Continua (CCDP), que calcula automáticamente el punto de lanzamiento óptimo, mejorando la precisión en el cumplimiento de la misión. Ambos sistemas fueron desarrollados por Embraer.

Según los datos de Embraer, la aeronave mantuvo un control completo durante los cambios de actitud e inclinación durante y después de cada lanzamiento de carga. Las maniobras más exigentes ocurrieron sin intervención del piloto, con los controles de vuelo en posición neutral. También hubo otras maniobras de prueba, como el lanzamiento secuencial de aire por extracción con hasta cuatro plataformas en una sola pasada, así como la eliminación de carga utilizando dos sistemas de extracción de 8,5 metros (28 pies) de diámetro con el piloto automático acoplado. Además del sistema CCDP para lanzamientos por gravedad y extracción en vuelo, se ha probado con éxito para una gran precisión.

La campaña de ensayo del C-390 se lleva a cabo incluso después de la entrega del primer avión a la FAB, considerada una situación de rutina en el segmento militar.