El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, afirmó en una conferencia de prensa, que su gobierno tiene informaciones certeras como para afirmar que el vuelo PS752 de Ukraine International, operado con un avión Boeing 737-800, fue derribado por un misil tierra-aire de corto-mediano alcance iraní, en la madrugada de ayer miércoles 8 de enero, matando a los 167 pasajeros (entre ellos 63 canadienses) y 9 tripulantes a bordo.
La declaración se suma a lo publicado por varios medios norteamericanos asegurando que el Pentágono tiene datos de inteligencia que sugiere que Irán pudo haber disparado por error dos misiles tierra-aire hacia el 737-800 de la aerolínea ucraniana que se estrelló a los cuatro minutos de haber despegado del aeropuerto internacional Iman Khomeini en Teherán con destino a Kiev, Ucrania.
Estas y otras informaciones ganaron mayor fuerza tras la publicación de un vídeo filmado por un lugareño, en el se puede observar a un objeto brillante dirigirse hacia algo en el cielo; luego se divisa un destello, lo que pareciera ser el impacto del misil contra el avión.
La tragedia se produjo después de que Irán lanzase decenas de misiles contra dos bases militares en Irak utilizadas por Estados Unidos en represalia por el asesinato del general iraní Qasem Soleimani en una operación militar estadounidense.

El representante de Ucrania ante las Naciones Unidas, Sergiy Kyslytsya, dijo que su país ha solicitado a Irán “acceso total” a las investigaciones sobre el accidente del avión en el que falleció la totalidad del pasaje y colaboradores de la compañía ucraniana y pidió que se eviten las “especulaciones”. Además de los viajeros de nacionalidad canadiense, en el vuelo PS752 iban 82 iraníes, 11 ucranianos, 10 suecos, 4 afganos, 3 alemanes y 3 británicos.