La aviación comercial de China está pasando por uno de sus peores momentos debido al brote del coronavirus que tiene en vilo a la mayoría de los países. Anteriormente a esta “crisis sanitaria”, las aerolíneas chinas venían operando con pérdidas en las rutas desde y hacia los Estados Unidos, pero mantenían las frecuencias ante el temor de perder los espacios o “Slots” en los principales aeropuertos.

Ante esta emergencia generada por el coronavirus, muchas líneas aéreas decidieron suspender sus vuelos hacia China debido a la bajísima ocupación en sus vuelos. Sin embargo, por orden de la Administración de Aviación Civil de China (CAAC), las compañías de ese país deben mantener todas las rutas internacionales que existen actualmente, a excepción de aquellos destinos que fueron obligados a ser suspendidos por regulaciones impuestas por el país de destino.
Considerando a esto, la aerolínea estatal Air China solicitará realizar vuelos domésticos dentro del continente americano para así poder paliar las bajas ocupaciones en sus vuelos. Actualmente, Air China llega a cinco destinos en los Estados Unidos; San Francisco, Los Ángeles, Houston, Washington DC y Nueva York; de los cuales estos últimos tres destinos están cerrados para todos los vuelos que vienen de China.

Por tal razón, Air China planea operar vuelos de pasajeros y carga, en ambas direcciones, desde Beijing a Los Ángeles y de ahí a San Francisco. De ser aprobado por las autoridades norteamericanas, el primer vuelo comenzará el 11 de febrero con un avión Boeing 777-300ER cuatro veces por semana. Además, pretende cubrir vuelos de pasajeros y cargas, en ambas direcciones, desde Beijing a Nueva York y de ahí a Washington DC, también con aviones Boeing 777-300ER tres veces por semana. Los tramos entre ciudades norteamericanas no estarán a la venta.