Después de un extenso programa de pruebas de dos años, Airbus ha concluido con éxito su programa de rodaje, despegue y aterrizaje autónomos (ATTOL).
Al completar este proyecto, Airbus ha logrado el taxeo, ascenso y descenso automáticos de una aeronave comercial A350-1000 XWB basados en la visión utilizando tecnología de reconocimiento de imágenes a bordo, la primera en la aviación mundial.
En total, se realizaron más de 500 vuelos de prueba. Aproximadamente 450 de esos ellos se dedicaron a recopilar datos de vídeo sin procesar, para apoyar y ajustar algoritmos, mientras que una serie de seis vuelos, cada uno con cinco despegues y aterrizajes, se usaron para probar las capacidades de vuelo autónomo.
Airbus inició el proyecto ATTOL para explorar cómo las tecnologías autónomas, incluido el uso de algoritmos de aprendizaje automático y herramientas automatizadas para el etiquetado de datos, el procesamiento y la generación de modelos, podrían ayudar a los pilotos a centrarse menos en las operaciones de las aeronaves y más en la toma de decisiones estratégicas y la gestión de misiones. Airbus puede ahora analizar el potencial de estas tecnologías para mejorar las operaciones futuras de los aviones de pasajeros, al tiempo que mejora la seguridad en el aire.
El fabricante continuará investigando la aplicación de tecnologías autónomas junto con otras innovaciones en áreas como materiales, sistemas de propulsión alternativos y conectividad. Al aprovechar estas oportunidades, Airbus está abriendo posibilidades para crear nuevos modelos de negocio que transformarán la forma en que se desarrollan, producen, vuelan, impulsan y mantienen los aviones.
El rápido desarrollo y la demostración de las capacidades de ATTOL fue posible gracias a los equipos globales de ingeniería y tecnología de Airbus, Airbus Defence and Space, Acubed (Project Wayfinder), Airbus China y ONERA bajo el liderazgo de Airbus UpNext.