Por cuarta vez, la República de Panamá extiende la prohibición de vuelos regulares internacionales hasta el próximo 23 de agosto, “por razones de salud pública”. La medida fue adoptada y comunicada ayer 17 de julio por la Autoridad Aeronáutica Civil (AAC). Se exceptúan todos los vuelos humanitarios, cargueros o que transporten equipos o insumos necesarios para afrontar la pandemia del coronavirus.
Los vuelos comerciales y de pasajeros están prohibidos desde el 23 de marzo, y originalmente debían reiniciarse el 23 de mayo, pero desde entonces, la AAC ha extendido la medida, primero hasta el 22 de junio, luego hasta el 22 de julio, y ahora, nuevamente hasta el 22 de agosto. Se cumplirán entonces cinco meses sin conectividad aérea regular en el país centroamericano.
Esta suspensión conllevará nuevos cambios en el cronograma principalmente de Copa Airlines, que con base en el aeropuerto internacional Tocumen de Ciudad de Panamá, había anunciado anteriormente que el 7 de agosto reiniciaba operaciones.
El transporte aéreo está incluido en el cuarto bloque (de un total de seis) del plan de reactivación económica. El primero arrancó el 13 de mayo y el segundo, el 1 de junio. Todavía no hay fecha para la reactivación de los demás bloques.