La Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), vaticina un magro panorama para la industria, que recién se podrá levantar en más tiempo de lo pensado.
“Nos dirigimos al quinto mes de parálisis en la aviación y aunque se está permitiendo la reanudación de los servicios aéreos en una escala muy limitada, esto no es de ninguna manera suficiente para empezar a salir de esta crisis”, afirmó Peter Cerdá en una nueva conferencia virtual.
Hoy por hoy, la IATA predice que la industria sólo se recuperará en 2024, un año más tarde de lo que habían pronosticado originalmente.

“La aviación es un motor para la economía y un catalizador para el desarrollo social de los países. No es sólo volar, es mover un país, una región y el mundo entero, pero con las restricciones a los viajes aéreos, los efectos económicos en los principales mercados de la región siguen mostrando tendencia a la baja”, dijo Cerdá.
La gente necesita ver a los gobiernos trabajar juntos para que puedan seguir con seguridad con vidas más normales. Para decenas de millones de personas, eso significa reanudar los trabajos en el sector de los viajes y turismo. Para cientos de millones más, eso significa la capacidad de viajar.
Dado que la aviación tiene protocolos de bioseguridad muy estrictos, no debería haber ninguna razón para mantener la industria en tierra por más tiempo
“Como industria, no podemos permitirnos permanecer en tierra por más tiempo. Hemos hecho nuestros deberes para diseñar las políticas y procedimientos necesarios que aseguren que la aviación no se convierta en un vector de transmisión de COVID-19”, enfatizó el ejecutivo
El pedido más importante en este momento es que necesitamos poder poner nuestros aviones en el aire. El apoyo financiero es importante, en eso la IATA sigue trabajando. Sin embargo lo más importe es que los gobiernos levanten restricciones y podamos reanudar de manera segura los vuelos domésticos e internacionales en nuestros países. Para que la industria pueda sobrevivir, para que pueda apoyar a los países en su reactivación económica y en su conectividad.

Las aerolíneas que conglomera IATA, aplica a rajatabla los protocolos que no tenían hace meses, garantizando con ello que podrán reabrir de manera segura y responsable. El transporte aéreo no es un lujo para América Latina, es una necesidad.
Por último, la IATA sentenció:
“Entramos al quinto mes detenidos, no hay ninguna industria en el mundo que pueda sobrevivir este tiempo sin algún tipo de apoyo y eso tendría un resultado fatal para nuestras aerolíneas que podría derivar en que muchas no puedan sobrevivir, y además el cese de operaciones permanentes de aerolíneas a muchos de nuestros países”.