El aeropuerto internacional de Miami, en Florida, EE.UU., será un protagonista relevante para América Latina en la distribución de la futura vacuna contra el Covid-19, misión logística sin precedentes en el mundo entero.
Y es que desde MIA International Airport existe una enorme red de rutas hacia las Américas y la terminal aérea posee la infraestructura necesaria para asegurar las condiciones de almacenamiento de las vacunas a -70 grados centígrados, con un área de 25.000 metros cuadrados refrigerados destinados exclusivamente al guardado de productos farmacéuticos, capacidad que muy pocos aeropuertos del planeta tienen. De hecho, Miami es la mayor terminal de carga aérea de los EE.UU., con espacio físico que podría ser incluso ampliado dentro del mismo predio y alrededores.

Adicional a los aeropuertos, las líneas aéreas cargueras y las que operan con aviones de pasajeros con posibilidad de uso de sus bodegas de carga, deben poder ofrecer la configuración de transporte de las vacunas a temperaturas bajísimas. DHL fue la primera en confirmar que cuenta con equipos para poder llevar a cabo la titánica tarea.
Todo parece indicar que durante los primeros días de diciembre, la Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), dará la aprobación a la primera de las vacunas contra el nuevo coronavirus, la de los laboratorios Pfizer/BioNTech.

Llevar estas vacunas hasta las personas será un desafío global y el aeropuerto de Miami está listo para asumirlo. Los aeropuertos serán parte de quienes están trabajando las 24 horas, los siete días de la semana para combatir este virus que ha sacudido a la humanidad.