La particular “cuarentena” del 737 MAX va llegando a su completo fin, al menos para la brasileña Gol. A diferencia de varias otras que aún no han retirado los protectores de sus componentes sensibles, Gol ya volvió a “la nueva normalidad” del MAX.
Con esto no sólo fue la primera aerolínea en el mundo en volver a poner al MAX en servicio comercial tras su largo reposo, si no además en hacerlo en totalidad de su flota, y todo en un periodo de sólo 12 días.
Esto denota la plena confianza que la aerolínea deposita en el fabricante Boeing y organismos de homologación como ANAC y FAA involucrados en su larga pero exitosa recertificación, y a la vez alienta a las demás compañías propietarias de este tipo avión a darle una “segunda oportunidad” al que hoy día podría tratarse del avión más seguro jamás construido, dado su especial tratamiento de revisión exhaustiva tras los conocidos accidentes con Lion Air y Etiopian Airlines en octubre de 2018 y marzo de 2019 respectivamente.
Los siete ya volaron en simultáneo

El día de ayer, donde quiera que veas un 737 MAX por cielos brasileños, probablemente era uno de los siete MAX que simultáneamente se encontraba en el aire, absolutamente ninguno en tierra, siendo la primera vez que tal “fenómeno” se da incluso desde que la compañía los puso en operación antes del grounding.
El pasado sábado 19, el último en desplegar alas fue el matriculado como PR-XMG. La rápida reactivación de las aeronaves fue posible gracias a que la firma decidió dejarlas en tierra pero en estado “activo”, por ejemplo encendiendo motores cada tanto y realizando constantes mantenimientos evitando así un almacenamiento de larga data, en cuyo caso el reingreso a operación hubiese tomado más tiempo partiendo de un punto cero.
De momento, los MAX sólo operan rutas desde y a Guarulhos. Pero esto podría cambiar en breve ya que la renovación de flota continúa, esperando para 2021 recibir otros 17 MAX encargados, de los cuales 15 ya están terminados en la planta de Boeing en Renton.