Un hecho curioso ocurrió el pasado 25 de diciembre, cuando una aeronave la aerolínea israelí El Al tuvo que desviar el espacio aéreo de Siria y Líbano por precaución a las baterías antiaéreas que estaban en alerta, debido a una incursión que estaba realizando las Fuerzas Aéreas Israelíes en ese momento.

El avión, un Boeing 787-9 Dreamliner con matrícula 4X-EDK, que cubría el vuelo LY-66 entre Shanghái, China, y Tel Aviv, Israel, fue alertado por el control aéreo de Chipre sobre el peligro de sobrevolar los espacios aéreos de Siria y Líbano derivado de la presencia de baterías antiaéreas desplegadas en ambos países para hacer frente a los ataques aéreos de Israel contra las milicias locales. Este desvío fue noticia en el medio ELINT News en su cuenta Twitter, donde se observa a la aeronave desviar la ruta sobre Chipre para finalmente acercarse a Israel.
Finalmente, el aparato aterrizó sin ningún problema, pero con un pequeño retraso en el aeropuerto internacional Ben Gurion de Tel Aviv. El peligro de las baterías antiaéreas está tan latente en la memoria de muchos desde aquel ataque en donde un misil tierra-aire disparado por tropas antigubernamentales ucranianas derribó al vuelo MH17 de Malaysia Airlines.