El pasado lunes 15 de marzo, la neerlandesa KLM, la línea aérea más antigua del mundo, retiró definitivamente el último Boeing 747-400 Combi de su flota, marcando así el final de medio siglo de historia de este tipo de aeronave introducida en 1971.
Se trató del ejemplar con matrícula PH-BFV bautizado como “Vancouver”, que emprendió el vuelo final #KL747 desde el Ámsterdam-Schipol, base de la compañía, hacia el aeropuerto de Teruel, en España, donde será almacenado a la espera de un nuevo operador.

Durante 50 años, KLM contó con 43 747 de diferentes variantes, entre ellos 23 unidades de la versión -400M (Combi). Estos equipos están configurados para transportar un mix de 268 pasajeros en tres clases y gran capacidad de carga. No obstante, Martinair, integrante del holding Air France-KLM, aún cuenta con tres Boeing 747-400F.