Airbus ha decidido concentrar sus esfuerzos en la creación de tanques de hidrógeno metálicos en una configuración complementaria mediante la instalación de centros de desarrollo de emisiones cero (ZEDC) en sus instalaciones de Bremen (Alemania) y Nantes (Francia).
El objetivo de ZEDC es lograr la fabricación de tanques criogénicos rentables para respaldar el lanzamiento próximo al mercado de ZEROe para acelerar el desarrollo de propulsión de tecnologías de hidrógeno. El diseño y la integración de estructuras de tanques es crucial para el desempeño de futuras aeronaves a hidrógeno.
Los desarrollos tecnológicos cubrirán todas las capacidades industriales y del producto, desde las piezas elementales, el ensamblaje, la integración de sistemas y las pruebas criogénicas del tanque de hidrógeno líquido final (LH2). Ambos ZEDC estarán en pleno funcionamiento en 2023 para construir tanques LH2 con un primer vuelo de prueba programado para 2025.
Airbus eligió la planta de Bremen debido a su configuración diversa y décadas de experiencia en LH2 dentro de Defensa y Espacio y ArianeGroup. La ZEDC en Bremen se centrará inicialmente en la instalación del sistema, así como en las pruebas criogénicas generales de los tanques. Además, esta ZEDC se beneficiará del ecosistema de investigación del hidrógeno más amplio, como el Centro de Materiales y Tecnologías Ecoeficientes (ECOMAT) y de nuevas sinergias de las actividades espaciales y aeroespaciales.
Asimismo, Airbus consideró el emplazamiento en Nantes teniendo en cuenta su amplio conocimiento en tecnologías estructurales metálicas relacionadas con la caja del ala central, incluido el tanque central de seguridad crítica para aviones comerciales. La ZEDC de Nantes aportará su capacidad para gestionar igualmente una amplia gama de tecnologías e integración metálicas y compuestas, así como su experiencia en actividades de diseño de códigos en entradas de góndolas, radomos y paquetes de trabajo complejos del fuselaje central. La ZEDC se beneficiará de las habilidades y capacidades del Technocentre de Nantes, respaldadas por un ecosistema local innovador como el IRT Jules Verne.
De acuerdo con las ambiciones regionales del norte de Alemania y Pays de Loire, Airbus fomentará la colaboración entre industrias para respaldar la transición general a las tecnologías de propulsión de hidrógeno, así como la infraestructura terrestre asociada en la región y componente crítico, para el cual se necesita ingeniería de sistemas específicos. La LH2 es más desafiante que el queroseno porque necesita almacenarse a -250 ° C para licuarse. Se necesita liquidez para aumentar la densidad. Para la aviación comercial, el desafío es desarrollar un componente que pueda resistir los ciclos térmicos y de presión repetidos que exige la aplicación en una aeronave.
Se espera que las estructuras de tanques de LH2 a corto plazo para aplicaciones de aviones comerciales sean metálicas, sin embargo, las oportunidades potenciales de rendimiento asociadas con los compuestos poliméricos reforzados con fibra de carbono son altas.