La firma hongkonesa Cathay Pacific se encuentra trabajando con el fabricante europeo de aeronaves Airbus, para introducir vuelos de larga distancia con “tripulación reducida”, es decir, un único piloto en la cabina la mayor parte del tiempo. Este programa está denominado como “Project Connect”, y tiene como objetivo certificar su aeronave A350 para operaciones single-pilot a partir del 2025 en las rutas de la compañía.
Una vez autorizados, los vuelos más largos serían posibles con un par de pilotos alternando descansos, en lugar de los tres o cuatro que se necesitan actualmente para mantener al menos dos en la cabina, por en tanto, sigue habiendo grandes obstáculos en el camino hacia la aceptación internacional.
“La idoneidad y eficacia de cualquier implementación de este tipo, así como el análisis general de costo-beneficio dependerán en última instancia, de cómo se desarrolle la pandemia”, dijo un vocero de Cathay Pacific. “Si bien estamos trabajando con Airbus en el desarrollo del concepto de operaciones de tripulación reducida, no nos hemos comprometido de ninguna manera a ser el cliente de lanzamiento”, recalcó.
Esta modalidad promete ahorros para las aerolíneas, en medio de la incertidumbre sobre la economía pospandémica de los vuelos intercontinentales, pero es probable que encuentre resistencia por parte de los pilotos que ya han sido afectados por despidos masivos y preocupaciones de seguridad sobre la automatización de aeronaves.

Las operaciones de un solo piloto, actualmente limitadas a aviones con hasta nueve pasajeros, necesitarían el respaldo del organismo de aviación de la ONU, la OACI, y de los países cuyo espacio aéreo cruzarán las aeronaves. El apoyo de China es clave para cualquier despliegue de Cathay Pacific.
“El Covid puede terminar acelerando esta evolución porque está ejerciendo una tremenda presión económica sobre la aviación”, predijo Filippo Tomasello, un exfuncionario de la EASA. “Si EASA certifica esta solución, las aerolíneas la utilizarán”, añadió.
Esta disputa posee adeptos y detractores; gremios de pilotos europeos han alzado su voz de alarma y no se encuentran de acuerdo por la demanda reducida que acarreará este método. En cambio, está rivalizada por compañías aéreas que sienten la gravedad económica que está ocurriendo actualmente a raíz del coronavirus, y que según expertos, costará recuperarse. La alemana Lufthansa tampoco se ha retirado de “Project Connect” y permanece involucrada como asesora en el programa.