El viernes pasado (12/11), Gol Líneas Aéreas operó el vuelo G3 7734, que partió del Aeropuerto Internacional de Brasilia (BSB) a las 9:20 am y aterrizó en Cancún, México, a las 3:15 pm. La operación marca el regreso de la compañía a lo que es uno de los destinos turísticos más valorados por los brasileños, el segundo en su reanudación internacional.
Cancún (CUN) es la segunda ciudad en el exterior en recibir vuelos de Gol este año; la primera fue Montevideo, Uruguay el 3/11. Con el avance de la vacunación en todo Brasil, Gol cree que los pasajeros ya se sienten más seguros y confiados para viajar a otros países.
“De regreso a Cancún”. El lema de Gol para esta reanudación guió toda la comunicación con los clientes en el vuelo inicial a México, país donde la empresa opera desde junio de 2019. Los discursos en la sala de embarque, en Brasilia, y durante el viaje, a bordo, fueron comandados por Luiz Teixeira, Gerente Comercial de Mercados Internacionales de Gol. En el aeropuerto internacional de Cancún, Gol transmitió un video con las palabras: “¡Hola, Cancún! ¡Regresamos al mejor lugar del mundo! ”
Los servicios hacia Cancún se realizan desde el aeropuerto de Brasilia, con cuatro frecuencias semanales: los lunes, miércoles, viernes y domingos, tanto de ida como de vuelta. La partida es a las 9:20 am, llegando a la ciudad mexicana a las 3:15 pm (hora local). Desde Cancún, el regreso es de noche (vuelo G3 7735), a las 9:25 pm, con aterrizaje programado a las 7:15 am del día siguiente en la capital federal.
Los horarios de vuelos fueron planificados para permitir conexiones rápidas desde todo el país hacia el Caribe, reduciendo el tiempo total de viaje. Gol es la única aerolínea brasileña que vuela a Cancún (así como a Punta Cana).
La ruta a Cancún se opera con la aeronave más moderna y tecnológica presente en la flota de Gol, el Boeing 737 MAX 8, uno de los pilares principales de esta reanudación y una parte clave para que la compañía logre la neutralidad de carbono para 2050.
El MAX es un 15% más económico en consumo de combustible, genera un 16% menos de emisiones de carbono, tiene una mayor autonomía de vuelo y es un 40% más silencioso en comparación con el 737-800 NG. En configuración internacional, su capacidad es de 176 pasajeros.