Boeing ha informado a la FAA, que algunas de las estructuras compuestas de sus 787 Dreamliner, han sido contaminadas con teflón y podrían no ser tan fuertes como se esperaba. La información está contenida en un memorando interno de la FAA revisado por el Seattle Times y es el último de una lista de defectos de fabricación que la agencia está investigando y revisando. No existe un riesgo de seguridad inmediato para la flota en servicio, pero el percance posiblemente retrasaría la reanudación de la producción de la aeronave.
“Estamos analizando los aviones no entregados de la nariz a la cola, y hemos encontrado áreas donde la fabricación no se ajusta a las especificaciones de ingeniería”, dijo un portavoz de Boeing al Seattle Times. “Ninguno de estos es un problema inmediato de seguridad del vuelo”.
La contaminación se produce durante el proceso de unión del material compuesto en muchos de los componentes grandes del avión. Las bolsas de plástico se utilizan para crear un vacío que mantiene el material compuesto en posición en un molde. La pieza se forma bajo calor y presión en un autoclave gigante. Las bolsas y el material utilizado para permitir la liberación de las bolsas contenían teflón y dejó un residuo en el compuesto. Ese residuo puede debilitar la unión cuando las piezas se unen con adhesivos. Inicialmente, las pruebas de Boeing mostraron que los bonos estaban dentro de las especificaciones, pero recientemente la compañía encontró bonos que son más débiles de los diseñados. La contaminación por teflón se ha encontrado en partes fabricadas por al menos dos de los contratistas que producen piezas grandes de la aeronave como alas, fuselaje y cola.
El Seattle Times también indica que el memorando contiene más información sobre el calce inadecuado de los espacios entre las partes causado por las ondas en el material compuesto. El memo dice que se han encontrado más huecos en las puertas de pasajeros y carga en el fuselaje de popa. Una vez más, no hay un problema de seguridad inmediato, pero los huecos podrían reducir la vida útil de los fuselajes porque pueden hacer que los sujetadores que sostienen la cobertura se salgan. Esa condición podría afectar hasta a 1.000 unidades.
Según los informes, el memorando también dice que los sujetadores de titanio defectuosos identificados anteriormente pueden estar en hasta 450 aviones y que existe un problema de seguridad potencial allí si dos de los sujetadores que no son de especificación están uno al lado del otro. La amenaza más seria son los accesorios que conectan la viga del piso al marco del fuselaje donde se unen las alas. Dos 787 de ANA almacenados en el desierto de California tenían ese defecto específico y Boeing los ha solucionado, según el mismo medio.