‘Downfall, The Case Against Boeing’, o ‘Descenso, El Caso Contra Boeing’, es el nombre del documental recientemente estrenado en la plataforma de streaming Netflix, que toca de pleno varios reportes de investigadores sobre la supuesta responsabilidad directa del fabricante estadounidense Boeing en la muerte de 346 personas derivada de dos accidentes fatales con aviones 737 MAX 8 de Lion Air y Ethiopian Airlines en octubre de 2018 y marzo de 2019 respectivamente.
Las dos tragedias son de conocimiento público y hemos replicado una serie de materiales al respecto en su momento y a lo largo del tiempo, por lo que en esta nota no volveremos a repetir los pormenores.
El documental, dirigido por Rory Kennedy, mismo host de «Last Days in Vietnam», deja en evidencia a la centenaria empresa norteamericana al sugerir, según testimonios de varios de sus ex empleados, que prioriza el lucro por sobre la seguridad de las personas, poniendo en el aire aviones que no deberían haber sido certificados, logros conseguidos ocultando información relevante a la FAA y engañando a las aerolíneas al asegurarles que los pilotos provenientes de aeronaves de la generación anterior del 737 no requerirían formación adicional. Asimismo, se destaca que el constructor de Seattle no tomó acciones posteriores al primer accidente, permitiendo que los aparatos continúen en servicio a sabiendas de que su seguridad era dudosa.
También se menciona la cuasi decadencia de calidad en la mayoría de los programas de nuevos aviones que ha venido sorteando la empresa desde mediados de la década de 1990 tras la fusión con McDonnell Douglas, con tropiezos, cuestionamientos, demoras y quejas, así como cambios en la cultura de confiabilidad, excelencia y foco profesional que le valieron a la firma una reputación envidiable en la industria, valor que lo fue perdiendo en los últimos años.
No te vamos a spoilear más, mirá el documental y sacá tus propias conclusiones.