Las aerolíneas rusas llegaron a acuerdos de compra de más de 80 aviones regionales en su exhibición aérea insignia esta semana, según compañías aeroespaciales y de arrendamiento respaldadas por el estado.
Rusia, al igual que otros países, ha restringido fuertemente el tráfico aéreo internacional debido al coronavirus desde el año pasado, pero las rutas domésticas están repuntando.
Las empresas estatales respaldadas por también estatales de arrendamiento dominaron las filas de compradores y vendedores en la exhibición aérea bienal MAKS-2021 que se inauguró el martes cerca de Moscú.
Cinco aerolíneas, tres de ellas de propiedad pública, encomendaron 58 Sukhoi Superjet 100 y 22 Ilyushin Il-114, según el holding aeroespacial United Aircraft Corporation (UAC) y la firma de leasing GTLK.
Red Wings firmó un acuerdo por 25 Superjet; las aerolíneas privadas Azimuth y Aurora (el gobierno busca convertir a esta última en una empresa enfocada en el Lejano Oriente ruso), firmaron contratos por diez y ocho de estos aviones, respectivamente, dijo UAC.
La filial Rossiya de Aeroflot pidió 15 Superjets. Los acuerdos apuntan al papel creciente de esta aeronave en servicios de cabotaje. El aparato de 100 asientos es usado casi exclusivamente por aerolíneas rusas y ha tenido problemas para encontrar compradores extranjeros.
Azimuth también compró seis Airbus A220-300; las entregas comenzarán el próximo año.
Mikhail Ganelin, analista senior de Aton, dijo que podría ser rentable para las líneas aéreas adquirir aviones regionales rusos debido a los términos favorables ofrecidos por los fabricantes y los subsidios para vuelos que no pasan por Moscú.
«La crisis es severa, pero el mercado interno está muy bien, casi se ha recuperado», dijo.
Las aerolíneas rusas perdieron la mitad de sus ingresos el año pasado. Pero los vuelos domésticos han ayudado a iniciar una recuperación, con las rutas locales casi alcanzando los niveles de 2019 entre enero y mayo y desde entonces incluso superando esos indicadores.